Elegir una lavadora puede parecer una tarea abrumadora debido a la amplia variedad de opciones disponibles en el mercado. Sin embargo, al considerar algunos factores clave, puedes tomar una decisión acertada, lo cual puede facilitar las tareas del hogar y ahorrar tiempo y dinero a largo plazo. Te compartimos algunos aspectos a tener en cuenta al elegir una lavadora:
¿Qué lavadora deberías comprar?
La carga de la lavadora es uno de los factores más relevantes al decidir qué lavadora comprar. Si eres un tech lover, te encantarán los nuevos modelos de lavadoras inteligentes, que calculan el volumen de ropa que has introducido y según el peso ponen el programa determinado. También son capaces de detectar los tipos de tejido y realizar autodiagnósticos. Incluso puedes programar algunas funciones a través de una app en el móvil.
¿En qué fijarte al elegir una lavadora?
Necesitas de conocer la capacidad de carga, según cuántos miembros tengas en casa. De forma orientativa, te damos unos consejos para elegir mejor la capacidad de carga de tu nueva lavadora:
- Para 1 ó 2 personas y menos de 4 usos por semana: 5-6 kg.
- Para 3 o 4 personas y unos 4-5 lavados por semana: 7-8 kg.
- Para más de 4 personas y 6 o más lavados por semana: 9 kg o más.
Dependiendo de la capacidad, velocidad y número de funciones, necesitarás un tipo de lavadora u otra. Toma en cuenta cómo diferenciar entre los distintos tipos de lavadora a continuación:
Lavadoras de carga frontal.
Es el tipo de lavadora más vendida en todo el mercado. La ropa se introduce por una puerta situada en la parte delantera. Son las más eficientes y ofrecen una gran versatilidad en cuanto a funciones, programas de lavado y capacidades de carga.
Son las más eficientes, con mayor capacidad, programas de lavado más avanzados y, aunque son más caras, caben más kilos de ropa y la lavan mejor.
Lavadoras de carga superior.
La ropa se introduce por una apertura en la parte superior, ya que el tambor está colocado de lado en lugar de situarse de frente. Gracias a eso, su anchura es más reducida, de unos 45 cm de ancho en lugar de 60 cm, aunque también suelen ser algo más altas (alrededor de 90 cm). Los modelos de carga superior son perfectos cuando no hay suficiente espacio para instalar una de carga frontal.
Lava-secadoras.
Combinan en una sola máquina las funciones de lavado y secado, por lo que son la mejor opción si tienes poco espacio en casa y no puedes secar la ropa en el exterior. Sus dimensiones son similares a las de una lavadora de carga frontal, pero algunas tienen menor capacidad de carga cuando se usan como secadora que como lavadora, lo que implica tener que retirar una parte de la colada al finalizar el lavado.
Las lavadoras también se diferencian por la velocidad del centrifugado, las revoluciones por minuto que puede alcanzar el motor, es decir, las vueltas que da el tambor. Cuanto más alto sea el número, más seca quedará la ropa, aunque eso no implica que el lavado sea mejor.
En el contexto de la conectividad y la tecnología smart, las lavadoras inteligentes también se proponen hacernos la vida mucho más fácil, con procesadores capaces de ajustar los programas de lavado, el uso de detergente o la temperatura.
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